EL CABELLO INTACTO?
Los cinco símbolos esenciales Sikh (5 K´s) son un auténtico regalo del gran Guru Gobind Singh Sahib para un Sikh, y un Sikh Amritdhari (Sikh que ha sido bautizado en la Khalsa), bajo ninguna circunstancia debe deshacerse de ellos.
Dentro de las cuatro prohibiciones (Kureht), deshacerse del Kesh (el cortarse el cabello) es la más significativa de ellas. El mantener el cabello intacto es el primer y el más obligatorio deber de un Sikh.
El Guru dio superior importancia al Kesh, ya que nombro "Kesh Garh" al lugar en donde se llevó a cabo la primera ceremonia de Bautismo Khalsa.
El camino Sikh está orgulloso de uno de sus grandes hijos, Bhai Sahib Randhir Singh Ji, quien vivió una vida de verdadero Sikh y sufrió cada una de las penalidades que se presentan al Sikh completamente dedicado y con determinación de los tiempos modernos y que caminan por el camino enseñado por los Gurus.
Cantó Akhand Kirtan y amó el Gurbani desde lo más profundo de su corazón. Su punto de vista sobre la básica y fundamental interrogante del Kesh está mejor descrita en el diálogo que sostuvo con el Supervisor de la prisión de Nagpur, ahí pasó 7 ½ años de su vida porque tomó parte activa en el Movimiento de Liberación Nacional durante el primer cuarto del siglo 20. El diálogo muestra un interesante y riguroso punto de vista religioso; revela la profunda fe y voluntad que Bhai Sahib mantenía y sostenía hacia con Dios y la aceptación del regalo del Kesh, sin medida y bajo cualquier circunstancia. Lo que yo he hecho al respecto, es intentar traducir al inglés el escrito de Bhai Sahib sobre este tema, mismo que se encuentra en el libro titulado "Cartas desde la prisión", tengo la profunda esperanza de que nuestro corazón Sikh adquiera fuerza en su fe y en el más prominente símbolo del Sikh Dharma. Este folleto fue impreso bajo la supervisión de la Oficina Central del Akhand Kirtani Jatha.Kirpal Singh M.A.Kent, Reino Unido7 de Septiembre de 1979.
¿Es necesario mantener el cabello largo intacto?(Diálogo entre Bhai Sahib Randhir Singh Ji y el Supervisor de la prisión de Nagpur, el Señor Gupta)
Un día, el Oficial de la prisión trajo un aceite para el cabello barato y de mala calidad para nuestro uso. Yo me negué a aceptarlo y le pedí que lo cambiara por un aceite de mejor calidad. Me había lavado el cabello con un jabón fuerte y me lo había puesto muy áspero y seco. Para no dañarlo, solo podía peinarlo si antes lo suavizaba con un poco de aceite. Si no podía peinar mi cabello, entonces no comería mis alimentos.
El Oficial y algunos trabajadores de la prisión, con excepción del nuevo supervisor, sabían bien de mi problema.
Lavé mi cabello por la mañana, el mediodía pasó y llegó la tarde, nadie se molestó en conseguirme el aceite para cabello. Gracias a su negligencia, tuve que pasarme el día sin comida y sin cena. El siguiente día era domingo y el Oficial de la prisión no fue a trabajar, y el supervisor normalmente no se acercaba los domingos. Al tercer día, el supervisor de la prisión se mantuvo ocupado inspeccionando otra sección de la prisión y nadie se molestó siquiera en mirarme. Tal vez todo el mundo había tomado ese asunto como sin no tuviera importancia y nadie me trajo aceite de buena calidad. El Supervisor no sabía nada de eso. Al cuarto día, cuando el supervisor estaba cerca de mi celda, el Oficial de la prisión y otros, unieron fuerzas en contra mía y se quejaron diciéndole que había estado teniendo un ataque de enojo los últimos cuatro días. El ya alertado Supervisor vino a verme y comenzó el siguiente diálogo entre nosotros:Supervisor: Bueno, Randhir Singh, desde que he estado viniendo a esta prisión, es la primera vez que me molestan y me atormentan diciéndome que alguien tiene un ataque de enojo. ¿Porqué no has tomado nada por tantos días y porqué me haces llevar la carga de todo esto?
Yo: Estimado Señor, no he hecho nada para hacerle sentir la carga de que no he comido nada por cuatro días, ni lo estoy atormentando de ninguna manera. Simplemente sucedió que lavé mi cabello hace cuatro días y no me han podido dar el aceite de cabello apropiado para mí. Si yo hubiera sabido que no lo obtendría, no me hubiera lavado el cabello con ese jabón cáustico aquel día. Después de lavar un cabello con ese tipo de jabón, se pone áspero, seco y enredado; y a menos que se aplique un buen aceite de cabello, el peinarse se hace imposible. El aceite suaviza el cabello y no se cae o rompe durante el peinado. Nosotros, los Sikhs, tenemos una estricta orden religiosa de peinar nuestros cabellos dos veces al día y tenemos prohibido comer sin antes tener nuestro cabello peinado; así que no puedo comer nada debido a mis mandamientos religiosos. No es correcto decir que estoy haciendo esto para desobedecer su ordenes.Al oír esto, el Supervisor se conmovió un poco, miró con desagrado al personal de la prisión y les preguntó que porqué nadie le había informado de este problema antes. Inmediatamente ordenó un aceite de cabello de buena calidad. Media hora después el aceite de buena calidad llegaba en manos del mismo Supervisor y mientras me lo entregaba me dijo de manera humilde, "Por favor perdóneme, ha tenido que sufrir innecesariamente debido a mi ausencia. Yo debo respetar sus sentimientos religiosos. Siento mucho lo que ha pasado y prometo que no sucederá de nuevo."Yo: Muchas gracias. El hecho es que el sentido de la responsabilidad que deben tener los departamentos de prisión y gobierno se ha dañado y los empleados en general se han vuelto deshonestos y envidiosos. Los encargados de hacer las compras de la prisión adquieren los artículos más baratos para los prisioneros y cargan el precio más alto al gobierno. Nadie se molesta en investigar, especialmente en una prisión. Los pobres prisioneros no pueden atreverse a quejarse, e incluso si lo hacen, nadie los escucha. Yo he adquirido un poco más de experiencia durante mi sentencia. Hay muchas irregularidades aquí. Hay ocho prisioneros políticos Sikh en esta prisión. Ellos también necesitarán una botella grande de aceite de coco para su uso del mes, pero esa gente no les da importancia y traen aceite de la más baja calidad, engañan al gobierno y explotan a los prisioneros.El Supervisor de la prisión escuchó esto y aceptó la crítica hacia los encargados de la prisión y me aseguró que había estado tomando acciones para remediar esos inconvenientes. Entonces, de repente, me hizo una pregunta "¿ES NECESARIO MANTENER EL CABELLO LARGO?Yo: ¿Es necesario mantener la cabeza en el cuerpo humano?
Supervisor: El cuerpo no puede sobrevivir sin la cabeza.
Yo: Pero, si pudiera sobrevivir, ¿estaría dispuesto a deshacerse de su cabeza? (Si el cuerpo pudiera sobrevivir sin la cabeza, se la cortaría?)
Supervisor: La cabeza es más importante y es una parte integral del cuerpo. Con la cabeza, el cuerpo está completo y sin ella, el cuerpo no puede sobrevivir.
Yo: ¿Acaso usted puso su cabeza sobre su cuerpo?
Supervisor: No, dios lo hizo.
Yo: Sin duda alguna, Dios la puso en su cuerpo. Pero, si hubiera sido puesta por usted, entonces tal vez se podría dar el lujo de deshacerse de ella como si su peso fuera indeseable.Supervisor: Por supuesto, pero ¿cómo podríamos darnos el lujo de quitarnos algo que Dios nos dio?
Yo: Bueno, suponga que alguien le quita a alguien esa cabeza que nos dio Dios ¿Cómo llamarían a esa persona?
Supervisor: Sin duda, él sería llamado tirano, opresor y asesino.
Yo: Si alguien llegara y le preguntara el porqué mantiene su cabeza en su cuerpo ¿qué pensaría de él?
Supervisor: Pues pensaría que es un estúpido.
Yo: Del mismo modo en que nuestras cabezas fueron puestas en nuestros cuerpos por manos del Creador, igualmente el cabello sobre mi cabeza y el suyo también, ha estado creciendo gracias al mismo Dios, el Creador. De ahí que su pregunta acerca de mantener el cabello largo sea irrelevante en sí, porque no soy yo quien hace que crezca el cabello de mi cabeza, sino que es un regalo de Dios. Así como la cabeza es un regalo de Dios, también lo es el cabello. Es nuestro deber cuidar el cabello (regalo de Dios) por encima de todo, igual que cuidamos de nuestra cabeza. Aquellos quienes no mantienen ese regalo dado por Dios en su cabeza (se cortan o se afeitan por completo su cabello), son, en mi bien considerado punto de vista, desagradecidos y desleales a la suprema voluntad de Dios. Yo los considero asesinos.
Supervisor: No, ellos no pueden ser llamados así, puedes llamarlos de otra manera, porque al cortarse el cabello no se derrama sangre.
Yo: Usted está diciendo que solamente si se derrama sangre se puede llamar asesinato. ¿Y si alguien es estrangulado? ¿Seguiría diciendo que eso no es un asesinato porque no se derramó sangre? Eso no estriba en argumentos verbales. Usted sabe perfectamente que en ciertos métodos de asesinato, no se derrama ni siquiera una gota de sangre. ¿No llamaría a los autores de esos crímenes asesinos? Si no ¿De qué otra forma los llamaría?
Supervisor: Discúlpeme, pero una vez que la cabeza es separada del cuerpo éste muere y la cabeza no crece de nuevo. Pero por otro lado, el cabello afeitado o corto, comienza a crecer de nuevo. Hay todo un mundo de diferencia entre esos dos hechos.
Yo: ¿Usted cree en la reencarnación del alma?
Supervisor: Sí.
Yo: Nadie muere después de la muerte, porque el alma emigra. Aquellos quienes mataron a otros, no pudieron matar su alma. El alma no muere y continúa naciendo nuevamente. El tratar de matar un alma es en vano, no puede haber éxito al tratar de hacerlo. Del mismo modo, el esfuerzo de aquellos quienes cortan o afeitan su cabello
una y otra vez, es inútil porque el cabello afeitado o cortado crece una y otra vez. La diferencia, sin embargo, es que el alma se mueve de una vida a otra y el asesino no se da cuenta de eso, pero el cabello continúa creciendo hasta que la persona muere. El crecimiento persistente del cabello actúa como un desaire a los esfuerzos de quien lo corta. De la misma forma en que la chispa de la vida del alma vive en la chispa de la vida de Dios, la chispa de vida del cabello continúa existiendo en la chispa de vida del cuerpo humano hasta que éste es destruido completamente. Es muy importante que cada cabello en la cabeza humana y en el cuerpo humano se mantenga intacto, porque ellos fueron puestos ahí por Dios, nuestro Creador. El cabello en la cabeza y en el cuerpo crece de acuerdo al largo que, de acuerdo a la fisiología y biología, necesita cada individuo de acuerdo a los planes de Dios. El cabello crece determinado largo y después deja de crecer naturalmente. Cualquier intento de detener el trabajo del Creador, ya sea cortar o hacer crecer más el cabello, es un intento tonto que va en contra de la Ley de Dios. La mujer no tiene cabello en la cara; cualquier intento humano de hacer crecer cabello ahí no funcionará. Igualmente el tratar de detener el crecimiento del cabello también es tonto. Dios, el Creador, le ha dado al hombre barbas, pero ellos se afeitan todos los días y tratan de verse como mujeres. Pero la naturaleza no los deja hacerlo; se afeitan, pero la naturaleza impulsa al cabello para que crezca nuevamente. Quienes se afeitan reciben un doble golpe, uno de la hoja de afeitar y el otro de la naturaleza cuando cada mañana nueva barba se asoma para hacerlos desistir de sus intentos; pero no se despiertan ante la última realidad.
Las mujeres también sufren humillación cuando tratan de cortar su cabello y tratan de verse como hombres imitando este loco intento. Ambos, hombres y mujeres, no han podido obtener nada de esos intentos. La pregunta ha sido ¿Porqué el regalo de la naturaleza no habría de mantenerse intacto en la cabeza y porque habría de ser cegado? Pero sorprendentemente, las preguntas son preguntadas al revés. La severa realidad es que hay una gran mayoría de personas quienes desafían al Divino debido a sus hábitos heredados por otros a través de siglos y se equivocaron al afeitarse la barba y cortar sus cabellos como si así fuera la forma natural. La razón es que, en el mundo, hay muy pocas y raras personas quienes se apegan y son consistentes con la Eterna Ley de la Naturaleza.
Cuando una persona de las grandes naciones del mundo tiene la oportunidad de mirar a un Sikh en su forma natural, se pregunta y pregunta al ver esa cara: ¿Es necesario mantener el cabello intacto? En su ignorancia, olvida que el cabello, al igual que otras partes del cuerpo, es algo que viene junto con todo cuerpo humano. Un Sikh nunca permite que ni siquiera un cabello sea removido de su cuerpo porque él se inclina a la Ley de Dios, él entiende que el cabello crece porque hay un propósito detrás y cree que es un pecado actuar de otra manera; tal como si un doctor aconsejara cerrar los poros de un cuerpo. La pregunta que hizo es un asunto muy complejo. Se podrían escribir volúmenes sobre este asunto y no tenemos suficiente tiempo para discutir completamente sobre la santidad de nuestro cabello. Aquellos quienes haces tales preguntas son usualmente Arya Samajists. ¿No esta usted perjudicado como ellos?
Supervisor: (Sonriendo) No, no soy tanto como un Arya Samajist, aunque, estoy inclinado a algunas creencias y practicas de Arya Samaj. Pero le hice esta pregunta a usted de manera espontánea. Incluso, aunque uso algunas palabras fuertes, de igual modo me gustaron algunas líneas de sus argumentos. Muchas de mis sospechas y conceptos están borrados ahora. Cuando usted salga de la cárcel, me gustaría que
escribiera un libro detallado sobre la filosofía del cabello y lo propagara por todo el mundo en los diferentes lenguajes. Sus argumentos acerca de que las personas que se cortan el cabello y afeitan la barba solo siguen las herencias como si fueran ovejas siguiendo a una manada me han impresionado. Todos nuestros rishis, sabios y profetas en tiempos ancestrales, eran keshbandaris (Con cabello al natural) lo cual significa que mantenían su cabello intacto.
Hay evidencia de que en los tiempos de Maha Bharata todos los Khatries, Brahmanes y líderes religiosos solían tener cabellos largos e intactos. En los viejos libros hindúes y escrituras está descrito cómo era innoble el hecho de cortarse el cabello y era, de hecho, uno de los siete castigos que se aplicaban bajo esa ley. El señor Krishna, nuestro avatar, sustituyó el cortar el pelo del hermano de Rukmani, Rukman por la pena de muerte para salvar su vida. Rukman se enojó tanto con esto. Estaba tan enojado que llamó a su hermana su enemigo porque ella fue la que recomendó que se le cortara el cabello. El mismo Rukman creyó que ese castigo era peor que la pena de muerte.
Valoro su punto de vista, es usted un verdadero Singh con altos ideales, ¡Sardar Randhir Singh! Ningún otro Singh me había convencido de esta forma. Un grano de argumento poderoso es más que suficiente para un buscador después de la verdad. Bueno, el tiempo ha pasado tan rápido, tenemos que dejar el asunto ahí. Namaste. Nos veremos pronto para seguir con esto.
Yo: ¡Sat Siri Akal! Hasta luego, seguramente no será pronto.Para ser honesto, la ocasión para seguir con ese diálogo nunca se presentó de nuevo, pero ese Supervisor de la prisión me pareció una persona amable y pensativa.
Dentro de las cuatro prohibiciones (Kureht), deshacerse del Kesh (el cortarse el cabello) es la más significativa de ellas. El mantener el cabello intacto es el primer y el más obligatorio deber de un Sikh.
El Guru dio superior importancia al Kesh, ya que nombro "Kesh Garh" al lugar en donde se llevó a cabo la primera ceremonia de Bautismo Khalsa.
El camino Sikh está orgulloso de uno de sus grandes hijos, Bhai Sahib Randhir Singh Ji, quien vivió una vida de verdadero Sikh y sufrió cada una de las penalidades que se presentan al Sikh completamente dedicado y con determinación de los tiempos modernos y que caminan por el camino enseñado por los Gurus.
Cantó Akhand Kirtan y amó el Gurbani desde lo más profundo de su corazón. Su punto de vista sobre la básica y fundamental interrogante del Kesh está mejor descrita en el diálogo que sostuvo con el Supervisor de la prisión de Nagpur, ahí pasó 7 ½ años de su vida porque tomó parte activa en el Movimiento de Liberación Nacional durante el primer cuarto del siglo 20. El diálogo muestra un interesante y riguroso punto de vista religioso; revela la profunda fe y voluntad que Bhai Sahib mantenía y sostenía hacia con Dios y la aceptación del regalo del Kesh, sin medida y bajo cualquier circunstancia. Lo que yo he hecho al respecto, es intentar traducir al inglés el escrito de Bhai Sahib sobre este tema, mismo que se encuentra en el libro titulado "Cartas desde la prisión", tengo la profunda esperanza de que nuestro corazón Sikh adquiera fuerza en su fe y en el más prominente símbolo del Sikh Dharma. Este folleto fue impreso bajo la supervisión de la Oficina Central del Akhand Kirtani Jatha.Kirpal Singh M.A.Kent, Reino Unido7 de Septiembre de 1979.
¿Es necesario mantener el cabello largo intacto?(Diálogo entre Bhai Sahib Randhir Singh Ji y el Supervisor de la prisión de Nagpur, el Señor Gupta)
Un día, el Oficial de la prisión trajo un aceite para el cabello barato y de mala calidad para nuestro uso. Yo me negué a aceptarlo y le pedí que lo cambiara por un aceite de mejor calidad. Me había lavado el cabello con un jabón fuerte y me lo había puesto muy áspero y seco. Para no dañarlo, solo podía peinarlo si antes lo suavizaba con un poco de aceite. Si no podía peinar mi cabello, entonces no comería mis alimentos.
El Oficial y algunos trabajadores de la prisión, con excepción del nuevo supervisor, sabían bien de mi problema.
Lavé mi cabello por la mañana, el mediodía pasó y llegó la tarde, nadie se molestó en conseguirme el aceite para cabello. Gracias a su negligencia, tuve que pasarme el día sin comida y sin cena. El siguiente día era domingo y el Oficial de la prisión no fue a trabajar, y el supervisor normalmente no se acercaba los domingos. Al tercer día, el supervisor de la prisión se mantuvo ocupado inspeccionando otra sección de la prisión y nadie se molestó siquiera en mirarme. Tal vez todo el mundo había tomado ese asunto como sin no tuviera importancia y nadie me trajo aceite de buena calidad. El Supervisor no sabía nada de eso. Al cuarto día, cuando el supervisor estaba cerca de mi celda, el Oficial de la prisión y otros, unieron fuerzas en contra mía y se quejaron diciéndole que había estado teniendo un ataque de enojo los últimos cuatro días. El ya alertado Supervisor vino a verme y comenzó el siguiente diálogo entre nosotros:Supervisor: Bueno, Randhir Singh, desde que he estado viniendo a esta prisión, es la primera vez que me molestan y me atormentan diciéndome que alguien tiene un ataque de enojo. ¿Porqué no has tomado nada por tantos días y porqué me haces llevar la carga de todo esto?
Yo: Estimado Señor, no he hecho nada para hacerle sentir la carga de que no he comido nada por cuatro días, ni lo estoy atormentando de ninguna manera. Simplemente sucedió que lavé mi cabello hace cuatro días y no me han podido dar el aceite de cabello apropiado para mí. Si yo hubiera sabido que no lo obtendría, no me hubiera lavado el cabello con ese jabón cáustico aquel día. Después de lavar un cabello con ese tipo de jabón, se pone áspero, seco y enredado; y a menos que se aplique un buen aceite de cabello, el peinarse se hace imposible. El aceite suaviza el cabello y no se cae o rompe durante el peinado. Nosotros, los Sikhs, tenemos una estricta orden religiosa de peinar nuestros cabellos dos veces al día y tenemos prohibido comer sin antes tener nuestro cabello peinado; así que no puedo comer nada debido a mis mandamientos religiosos. No es correcto decir que estoy haciendo esto para desobedecer su ordenes.Al oír esto, el Supervisor se conmovió un poco, miró con desagrado al personal de la prisión y les preguntó que porqué nadie le había informado de este problema antes. Inmediatamente ordenó un aceite de cabello de buena calidad. Media hora después el aceite de buena calidad llegaba en manos del mismo Supervisor y mientras me lo entregaba me dijo de manera humilde, "Por favor perdóneme, ha tenido que sufrir innecesariamente debido a mi ausencia. Yo debo respetar sus sentimientos religiosos. Siento mucho lo que ha pasado y prometo que no sucederá de nuevo."Yo: Muchas gracias. El hecho es que el sentido de la responsabilidad que deben tener los departamentos de prisión y gobierno se ha dañado y los empleados en general se han vuelto deshonestos y envidiosos. Los encargados de hacer las compras de la prisión adquieren los artículos más baratos para los prisioneros y cargan el precio más alto al gobierno. Nadie se molesta en investigar, especialmente en una prisión. Los pobres prisioneros no pueden atreverse a quejarse, e incluso si lo hacen, nadie los escucha. Yo he adquirido un poco más de experiencia durante mi sentencia. Hay muchas irregularidades aquí. Hay ocho prisioneros políticos Sikh en esta prisión. Ellos también necesitarán una botella grande de aceite de coco para su uso del mes, pero esa gente no les da importancia y traen aceite de la más baja calidad, engañan al gobierno y explotan a los prisioneros.El Supervisor de la prisión escuchó esto y aceptó la crítica hacia los encargados de la prisión y me aseguró que había estado tomando acciones para remediar esos inconvenientes. Entonces, de repente, me hizo una pregunta "¿ES NECESARIO MANTENER EL CABELLO LARGO?Yo: ¿Es necesario mantener la cabeza en el cuerpo humano?
Supervisor: El cuerpo no puede sobrevivir sin la cabeza.
Yo: Pero, si pudiera sobrevivir, ¿estaría dispuesto a deshacerse de su cabeza? (Si el cuerpo pudiera sobrevivir sin la cabeza, se la cortaría?)
Supervisor: La cabeza es más importante y es una parte integral del cuerpo. Con la cabeza, el cuerpo está completo y sin ella, el cuerpo no puede sobrevivir.
Yo: ¿Acaso usted puso su cabeza sobre su cuerpo?
Supervisor: No, dios lo hizo.
Yo: Sin duda alguna, Dios la puso en su cuerpo. Pero, si hubiera sido puesta por usted, entonces tal vez se podría dar el lujo de deshacerse de ella como si su peso fuera indeseable.Supervisor: Por supuesto, pero ¿cómo podríamos darnos el lujo de quitarnos algo que Dios nos dio?
Yo: Bueno, suponga que alguien le quita a alguien esa cabeza que nos dio Dios ¿Cómo llamarían a esa persona?
Supervisor: Sin duda, él sería llamado tirano, opresor y asesino.
Yo: Si alguien llegara y le preguntara el porqué mantiene su cabeza en su cuerpo ¿qué pensaría de él?
Supervisor: Pues pensaría que es un estúpido.
Yo: Del mismo modo en que nuestras cabezas fueron puestas en nuestros cuerpos por manos del Creador, igualmente el cabello sobre mi cabeza y el suyo también, ha estado creciendo gracias al mismo Dios, el Creador. De ahí que su pregunta acerca de mantener el cabello largo sea irrelevante en sí, porque no soy yo quien hace que crezca el cabello de mi cabeza, sino que es un regalo de Dios. Así como la cabeza es un regalo de Dios, también lo es el cabello. Es nuestro deber cuidar el cabello (regalo de Dios) por encima de todo, igual que cuidamos de nuestra cabeza. Aquellos quienes no mantienen ese regalo dado por Dios en su cabeza (se cortan o se afeitan por completo su cabello), son, en mi bien considerado punto de vista, desagradecidos y desleales a la suprema voluntad de Dios. Yo los considero asesinos.
Supervisor: No, ellos no pueden ser llamados así, puedes llamarlos de otra manera, porque al cortarse el cabello no se derrama sangre.
Yo: Usted está diciendo que solamente si se derrama sangre se puede llamar asesinato. ¿Y si alguien es estrangulado? ¿Seguiría diciendo que eso no es un asesinato porque no se derramó sangre? Eso no estriba en argumentos verbales. Usted sabe perfectamente que en ciertos métodos de asesinato, no se derrama ni siquiera una gota de sangre. ¿No llamaría a los autores de esos crímenes asesinos? Si no ¿De qué otra forma los llamaría?
Supervisor: Discúlpeme, pero una vez que la cabeza es separada del cuerpo éste muere y la cabeza no crece de nuevo. Pero por otro lado, el cabello afeitado o corto, comienza a crecer de nuevo. Hay todo un mundo de diferencia entre esos dos hechos.
Yo: ¿Usted cree en la reencarnación del alma?
Supervisor: Sí.
Yo: Nadie muere después de la muerte, porque el alma emigra. Aquellos quienes mataron a otros, no pudieron matar su alma. El alma no muere y continúa naciendo nuevamente. El tratar de matar un alma es en vano, no puede haber éxito al tratar de hacerlo. Del mismo modo, el esfuerzo de aquellos quienes cortan o afeitan su cabello
una y otra vez, es inútil porque el cabello afeitado o cortado crece una y otra vez. La diferencia, sin embargo, es que el alma se mueve de una vida a otra y el asesino no se da cuenta de eso, pero el cabello continúa creciendo hasta que la persona muere. El crecimiento persistente del cabello actúa como un desaire a los esfuerzos de quien lo corta. De la misma forma en que la chispa de la vida del alma vive en la chispa de la vida de Dios, la chispa de vida del cabello continúa existiendo en la chispa de vida del cuerpo humano hasta que éste es destruido completamente. Es muy importante que cada cabello en la cabeza humana y en el cuerpo humano se mantenga intacto, porque ellos fueron puestos ahí por Dios, nuestro Creador. El cabello en la cabeza y en el cuerpo crece de acuerdo al largo que, de acuerdo a la fisiología y biología, necesita cada individuo de acuerdo a los planes de Dios. El cabello crece determinado largo y después deja de crecer naturalmente. Cualquier intento de detener el trabajo del Creador, ya sea cortar o hacer crecer más el cabello, es un intento tonto que va en contra de la Ley de Dios. La mujer no tiene cabello en la cara; cualquier intento humano de hacer crecer cabello ahí no funcionará. Igualmente el tratar de detener el crecimiento del cabello también es tonto. Dios, el Creador, le ha dado al hombre barbas, pero ellos se afeitan todos los días y tratan de verse como mujeres. Pero la naturaleza no los deja hacerlo; se afeitan, pero la naturaleza impulsa al cabello para que crezca nuevamente. Quienes se afeitan reciben un doble golpe, uno de la hoja de afeitar y el otro de la naturaleza cuando cada mañana nueva barba se asoma para hacerlos desistir de sus intentos; pero no se despiertan ante la última realidad.
Las mujeres también sufren humillación cuando tratan de cortar su cabello y tratan de verse como hombres imitando este loco intento. Ambos, hombres y mujeres, no han podido obtener nada de esos intentos. La pregunta ha sido ¿Porqué el regalo de la naturaleza no habría de mantenerse intacto en la cabeza y porque habría de ser cegado? Pero sorprendentemente, las preguntas son preguntadas al revés. La severa realidad es que hay una gran mayoría de personas quienes desafían al Divino debido a sus hábitos heredados por otros a través de siglos y se equivocaron al afeitarse la barba y cortar sus cabellos como si así fuera la forma natural. La razón es que, en el mundo, hay muy pocas y raras personas quienes se apegan y son consistentes con la Eterna Ley de la Naturaleza.
Cuando una persona de las grandes naciones del mundo tiene la oportunidad de mirar a un Sikh en su forma natural, se pregunta y pregunta al ver esa cara: ¿Es necesario mantener el cabello intacto? En su ignorancia, olvida que el cabello, al igual que otras partes del cuerpo, es algo que viene junto con todo cuerpo humano. Un Sikh nunca permite que ni siquiera un cabello sea removido de su cuerpo porque él se inclina a la Ley de Dios, él entiende que el cabello crece porque hay un propósito detrás y cree que es un pecado actuar de otra manera; tal como si un doctor aconsejara cerrar los poros de un cuerpo. La pregunta que hizo es un asunto muy complejo. Se podrían escribir volúmenes sobre este asunto y no tenemos suficiente tiempo para discutir completamente sobre la santidad de nuestro cabello. Aquellos quienes haces tales preguntas son usualmente Arya Samajists. ¿No esta usted perjudicado como ellos?
Supervisor: (Sonriendo) No, no soy tanto como un Arya Samajist, aunque, estoy inclinado a algunas creencias y practicas de Arya Samaj. Pero le hice esta pregunta a usted de manera espontánea. Incluso, aunque uso algunas palabras fuertes, de igual modo me gustaron algunas líneas de sus argumentos. Muchas de mis sospechas y conceptos están borrados ahora. Cuando usted salga de la cárcel, me gustaría que
escribiera un libro detallado sobre la filosofía del cabello y lo propagara por todo el mundo en los diferentes lenguajes. Sus argumentos acerca de que las personas que se cortan el cabello y afeitan la barba solo siguen las herencias como si fueran ovejas siguiendo a una manada me han impresionado. Todos nuestros rishis, sabios y profetas en tiempos ancestrales, eran keshbandaris (Con cabello al natural) lo cual significa que mantenían su cabello intacto.
Hay evidencia de que en los tiempos de Maha Bharata todos los Khatries, Brahmanes y líderes religiosos solían tener cabellos largos e intactos. En los viejos libros hindúes y escrituras está descrito cómo era innoble el hecho de cortarse el cabello y era, de hecho, uno de los siete castigos que se aplicaban bajo esa ley. El señor Krishna, nuestro avatar, sustituyó el cortar el pelo del hermano de Rukmani, Rukman por la pena de muerte para salvar su vida. Rukman se enojó tanto con esto. Estaba tan enojado que llamó a su hermana su enemigo porque ella fue la que recomendó que se le cortara el cabello. El mismo Rukman creyó que ese castigo era peor que la pena de muerte.
Valoro su punto de vista, es usted un verdadero Singh con altos ideales, ¡Sardar Randhir Singh! Ningún otro Singh me había convencido de esta forma. Un grano de argumento poderoso es más que suficiente para un buscador después de la verdad. Bueno, el tiempo ha pasado tan rápido, tenemos que dejar el asunto ahí. Namaste. Nos veremos pronto para seguir con esto.
Yo: ¡Sat Siri Akal! Hasta luego, seguramente no será pronto.Para ser honesto, la ocasión para seguir con ese diálogo nunca se presentó de nuevo, pero ese Supervisor de la prisión me pareció una persona amable y pensativa.